¡Maestro, esta semana te quiero platicar sobre otra herramienta imprescindible en el proceso formativo de los alumnos: El desarrollo personal del maestro. Nosotros como docentes, influimos de manera directa en los chicos a través de nuestra formación profesional pero también lo hacemos de una forma más cercana, a través de las emociones. De ahí la importancia de estar en continua evolución como seres humanos. Y hoy te quiero compartir desde una visión neuroeducativa, sobre el manejo de ese mundo emocional, que te puede llevar a ser una mejor persona y un mejor maestro.
Importancia de la vida emocional
Durante un largo período de tiempo en nuestra historia, el estudio de las emociones estuvo en el olvido, no eran reconocidas ni se le prestaba la debida atención a la expresión de los sentimientos. Afortunadamente ahora gracias a todos los avances en la ciencia, los científicos pueden ser capaces de ver lo que sucede en el cerebro cuando se están experimentando diversas emociones como lo son el miedo, la tristeza, el dolor, la alegría, etc. Se conoce qué partes del cerebro se activan y cómo impactan en nuestro cuerpo y por lo tanto en nuestra vida. Todo este conocimiento está a nuestro alcance para tomar conciencia de su importancia y ser capaces de detectar el clima emocional que se desarrolla en nuestro propio ser y verlo también dentro de un contexto escolar.
Inteligencia emocional
Se divide en dos:
1. Inteligencia Interpersonal: Que es la capacidad de establecer relaciones con otras personas.
Los docentes necesitamos aprender a identificar, aceptar y tener dominio sobre nuestras emociones, comprender de dónde surgen para poder controlarlas; porque si tú no eres capaz de reconocer y manejar tus propias emociones, mucho menos podrás hacerlo con las de tus alumnos y esto representa un gran obstáculo en nuestra labor educativa. El desarrollar nuestra inteligencia emocional es básico para relacionarnos propiamente con los demás, esto se verá reflejado en nuestra comunicación asertiva, en nuestras actitudes a través de la tolerancia, respeto y sobre todo en la empatía.
Emociones reprimidas o mal procesadas
Son las que no queremos escuchar o a las que no les damos importancia y se quedan ahí atrapadas en el cuerpo, ocupando espacio en nuestro interior, tomando control y fuerza en nuestros pensamientos y comportamientos desbocados. Y lamentablemente al cabo de cierto tiempo de estar ahí desatendidas y reprimidas, se manifiestan en nuestro cuerpo en forma de enfermedades, cortando así el flujo de nuestro bienestar. Pero si tú tomas conciencia de la profunda relación entre emoción, cognición y comportamiento; estarás bien posicionado y preparado para dominar tu entorno.
Saber leer las emociones
Esto implica tener la capacidad de poder interpretar lo que alguien está queriéndote decir a través del tono de su voz, a través de su semblante, a través de su corporalidad. Generalmente son expresiones muy sutiles que pasan desapercibidas pero que revelan claramente sentimientos y emociones. Como por ejemplo podemos observar a quienes encorvan los hombros, agachan siempre la mirada, les tiembla el labio o incluso los párpados, hay sudoración en las manos, hablan de manera muy apresurada, se tocan constantemente la nariz y se tallan los ojos, se les forma una hendidura en medio de las cejas, tienen las comisuras caídas, ojos desorbitados, etc. Saberlas identificar y atenderlas en ti y sobre todo en los alumnos, significa dejarlos de dañar con castigos absurdos y regaños generalmente contraproducentes.
Haz las paces con las emociones y el bienestar
Que felicidad sería ver a todos viviendo una vida emocional sana, con perfecto dominio, identificación y aceptación de sus sentimientos y emociones. Parece ser inalcanzable porque parte de nuestra experiencia humana es pasar por un sinfín de aprendizajes, entre oportunidades, motivaciones, desafíos, sueños, momentos de tensión, tristezas, alegrías, miedos, risas, etc. Todo un abanico de emociones. Pero a fin de cuentas, la decisión es tuya, tú decides qué es lo que vas a hacer con tu forma de ser, hacia dónde deseas ir. Tú tienes el poder de ser un árbol fuerte, con raíces profundas. Depende de ti si quieres ser un maestro ejemplar y deseas dejar una hermosa huella en tus alumnos.
Como maestros es esencial que se conozca y se tome conciencia de este proceso socioemocional, te invito a profundizar mucho más sobre esta herramienta de autoconocimiento, es mi forma de ayudarte y darte ese empujoncito hacia lo que debes considerar para estar listo y que puedas ver grandes cambios.
¡Comienza siempre por ti, obsérvate, que tengas una increíble semana!
Aquí te comparto un video sobre la educación socioemocional para docentes, corre a verlo
